Nueva Sala de Exposiciones Liège Expo+
15-07-2019-
Lieja-Bélgica
23.664 m2
Un recinto ferial como el que es objeto del presente concurso en Lieja posee, junto al carácter de dotación pública, de servicio, una dimensión institucional convirtiendo un problema arquitectónico en una magnífica oportunidad para transformar el entorno urbano inmediato así como para mejorar la ciudad como referente arquitectónico.
Esta dimensión contextual y de búsqueda de valor urbana ha de coexistir con la eficacia organizativa y funcional del programa de un recinto ferial. Ambos en absoluto son contradictorios. El programa a completar se resume a partir de las siguientes propuestas: 1) Máxima claridad para resolver la asistencia masiva de personas en períodos muy concretos de tiempo, 2) Exigencia de una gestión rápida y eficaz de los espacios expositivos disminuyendo al máximo los tiempos y desplazamientos de montaje, 3) Capacidad de adaptación de estos espacios expositivos para las distintas demandas propias de un recinto ferial y 4) Una claridad en circulaciones y accesos.
La plaza de acceso no solamente dota al edificio de carácter público, no solo aumenta su capacidad de regenerar el contexto, sino que ordena de manera clara el acceso al edificio en la medida que es un lugar previo a la entrada. A esta plaza son conducidos mediante “una puerta de acceso” todos los visitantes que llegan desde la estación del tranvía o desde los aparcamientos situados en el lado sur. Los visitantes, una vez traspasado el “acceso” se encontrarán con la sorpresa del espacio de la plaza. Es en el lado este, opuesto a la plaza, donde se ubica la gran explanada de servicios apta para la circulación cómoda de los camiones así como para albergar los aparcamientos al servicio de expositores, empleados y usuarios distintos del público general. Todos los aparcamientos quedan envueltos para áreas verdes.
La planta, una vez traspasado el vestíbulo abierto a la plaza de acceso que también puede utilizarse como lugar de exposición, se resuelve mediante la disposición central de todas las salas, unidas y en continuidad de manera que su posible unión o separación sea lo más inmediata y fácil posible. Estas salas así dispuestas quedan rodeadas por tres de sus lados, oeste, norte y sur, por circulaciones de personas de tal manera que estas dispongan de un acceso fácil e inmediato y, lo que es más importante, puedan unirse sin depender de la disposición de accesos.
Una sala de 1.000 m2 de superficie se escapa de esta disposición central y conjunta del resto de las salas, ubicándose en el extremo sur de la plaza conformando la entrada desde el acceso marcado por la parada del tranvía.
Esta disposición posibilita no obstante dar respuesta a determinados usos expositivos que requieran estar en contacto con la plaza, pero también a otro tipo de usos.
Proponemos una sección del edificio en donde la estructura de cubierta adquiere grandes dotes de expresividad arquitectónica, a la vez que cualifica el espacio interior. Estamos ante un programa donde es esencial disponer espacios de superficies libres no condicionados por la estructura del edificio, y ello implica que la estructura horizontal adquiera importancia per sé, se convierte en una parte especial del proyecto que nos ayuda a configurar espacios atractivos.